¡Compartir es mejorarnos!
¿Cuántas veces te has parado unos minutos a descansar y te has encontrado al rato con que en vez de un descanso te has cansado más? En realidad… ¿Cuántas veces te has parado a descansar?
En este artículo vas a conocer la importancia del tiempo de descanso, en qué debes invertir el tiempo mientras descansas, cómo lo hago yo desde hace unos meses para mejorar enormemente mi productividad y los beneficios de la mejor de las maneras de conseguirlo.
Pero primeramente, hoy te quiero presentar a uno de mis mejores amigos de los últimos meses.
Se hace llamar Florencio (porque aflora cuando lo necesitas), aunque a veces le llaman Prudencio (por su exquisita prudencia). Sin embargo, pocos saben que su verdadero nombre es parecido a éstos.
En realidad, él nunca lo ha pronunciado. Este querido amigo mío tiene por nombre Silencio.
El poder del silencio
Esa ausencia de sonido olvidado por la mayoría. Yo era uno de ellos.
Bien sea por el ritmo del día a día, el estilo de vida, las circunstancias externas, la familia, la pareja, los amigos, el jefe, el móvil, la televisión, el tráfico… Coincidirás conmigo que es complicado desconectar un rato al día.
En todos los anteriores casos hay ruido. Mucho ruido. El ruido genera estrés y aumenta tu sensación de intranquilidad.
Evidentemente hay situaciones en las que no puedes controlar a tu gusto el nivel de ruido, pero como siempre te digo, hay ciertos momentos en el día en que lo que acontece depende sólo y exclusivamente de ti.
Los ríos más profundos son siempre los más silenciosos — Curcio
2 ratitos al día
Te propongo que a partir de hoy busques un momento al día por la mañana y un momento al día por la tarde para estar en silencio. Estos dos ratitos tienen objetivos distintos.
El propósito del ratito de por la mañana (de 5 a 10 minutos) es el de empezar el día en estado de paz, visualizar tu día de forma positiva y coger fuerzas y energía.
Hazlo antes de ir a trabajar. Esto te produce los siguientes beneficios:
- incrementa las emociones positivas y tu estado anímico (te hace sentir más feliz)
- mejora tu atención y tu memoria
- incrementa tu autocontrol
- mejora tus relaciones profesionales y personales
- aumenta tu sensación de control del tiempo (mientras antes corrías para salir de casa y llegar a tiempo al trabajo)
- y sobre todo, AUMENTA TU PRODUCTIVIDAD
Personalmente he notado mucho el hecho de que soy bastante más productivo a la hora de trabajar.
Adicionalmente, sientes como un aura de feeling positivo, de buena vibración que tú mismo creas para empezar el día de la mejor forma posible. Los resultados son inmediatos.
Cuanto más ajetreado tengas el día, más tiempo deberías invertir en estar en silencio por las mañanas. Te ayudará mucho.
El silencio es el elemento en el que se forman todas las cosas grandes — Thomas Carlyle
Por el contrario, el objetivo del ratito de por la tarde es simple: DESCANSAR física, mental y acústicamente de tu ajetreado día de trabajo. Un tiempo de descanso.
Es entrar en una armonía con tu cuerpo y con tu mente. Armonía de relax. Esto te produce los siguientes beneficios:
- disminuye la ansiedad
- reduce el estrés y la depresión
- minimiza las preocupaciones
- aumenta abrumadoramente tu sensación de bienestar, produciéndote calma, serenidad y tranquilidad
Es muy fácil: busca un sitio de la casa en el que estés solo y no haya ruido y relájate durante 5 o 10 minutos. Estate en silencio.
Nunca rompas el silencio si no es para mejorarlo — Ludwig van Beethoven
¿Y en qué pienso mientras estoy en silencio?
En NADA. Calma tu mente, disfruta del poder del «no hacer nada», de tu tiempo de descanso, de la soledad y de vivir en el presente.
Tu objetivo es descansar tu cerebro de tanto ajetreo y de tanto ruido. El silencio es la mejor manera. No le tengas miedo.
Soy tan partidario de la disciplina del silencio que podría hablar horas enteras sobre ella — George Bernard Shaw
Pero ¿qué pasa cuando intentas estar 5 minutos en silencio sin pensar en nada? Que al principio te cuesta horrores. Es lo que yo llamo que tu silencio está lleno de ruidos.
Requiere práctica el poder tener la suficiente tranquilidad y paz interior y el suficiente poder de autocontrol como para estar 5 minutos sin pensar en nada, con tu mente serena.
Y haciendo esto has entrado sin saberlo, querido amigo, en la práctica de la meditación. Esa palabra que a muchos (a mí también hace unos meses) nos resulta un tanto espiritual, mística, lejana: para otros seres más preparados.
Sin embargo, uno de los principales objetivos de la meditación es calmar tu mente y recargar energía, al sentirte mucho más descansado (te hablaré más en detalle de la meditación en un nuevo post). Créeme, tú también puedes hacerlo.
¿Pero Miguel Ángel, quién «&:)%$)=r!!» tiene tiempo para “no hacer nada”?
Sólo los que tienen tiempo para "no hacer nada" tienen tiempo para "hacer algo"
He aprendido mediante experiencia propia que la meditación y el pequeño descanso son dos de las mejores maneras de invertir el recurso más poderoso que tenemos: el tiempo.
Un buen y breve tiempo de descanso no es tiempo improductivo, es tiempo invertido. ¿En qué? En descansar y desconectar.
Y aquí viene la segunda propuesta de hoy: haz descansos cada cierto tiempo e invierte ese tiempo de descanso en descansar.
Haz descansos cada cierto tiempo e invierte ese tiempo de descanso en descansar
Desde hace unos meses sigo la regla del 90/10. Esto es, trabajo por bloques de 90 minutos y después realizo un tiempo de descanso de 10 minutos.
Bien es verdad que dependiendo de la exigencia de la tarea a realizar, puede que disminuya el tiempo de cada bloque e invierta 60 minutos (o incluso menos), pero el tiempo de descanso de 10 minutos lo mantengo.
Esto, en mi experiencia personal, ha dado un muy buen resultado. Pero lo más importante aquí es cómo inviertes esos 10 minutos de descanso.
Qué hacer en tu tiempo de descanso
Irte al servicio y pensar en lo que estabas haciendo hace 1 minuto no es descansar. Quedarte enfrente del ordenador mirando páginas web no es descansar. Estar con el móvil en redes sociales no es descansar.
Todo esto lo puedes hacer, indudablemente, pero no lo cuentes en esos 10 minutos de tiempo de descanso.
Necesitas 10 minutos reales de descanso para poder estar otros 90 minutos trabajando productivamente, sea lo que sea a lo que te dediques.
Y sólo se descansa verdaderamente si tu mente y tu cuerpo están relajados. Las opciones que te propongo son:
- dar una vuelta corta por un parque o fuera del lugar de trabajo (si es por el exterior del edificio, mejor), y contempla la Naturaleza, los alrededores o lo que tengas a la vista.
- meditar, relajando tu cuerpo y mente.
- escuchar música suave mientras das un paseo o descansas.
- ir al servicio, ir a beber agua o ir a comer una fruta.
Personalmente me encanta la primera de las 4 opciones y es la que más practico, ya que un paseo en conexión con lo que te rodea sirve para desconectar totalmente y para relajarte. Y si eso que te rodea es Naturaleza, mejor que mejor 🙂
Si además añades la 3ª opción, el paseo + la música, la combinación es perfecta para volver a rendir otros 90 minutos al máximo nivel.
Conclusión
Con la práctica de estas dos técnicas (de silencio y de descanso corto) vas a mejorar profundamente tu productividad en el trabajo.
Con el hábito del silencio te adentrarás en la práctica de la meditación y de sus múltiples beneficios.
Con el hábito del descanso corto descubrirás cómo recargas eficientemente las pilas en tan sólo 10 minutos.
¡Ya verás como lo notas!
Un placer escribir para ti, amig@.
Miguel Ángel
Ahora tú
¿Cada cuánto tiempo descansas? ¿Cómo de largos son tus descansos? ¿Qué haces mientras estás en tu tiempo de descanso? Coméntame por favor tu experiencia con el silencio. ¿Cómo te sentó ese ratito de silencio?
Deseando estoy saber tus resultados. Cuéntamelos aquí abajo pero hoy hazlo relajad@, tranquil@ y en silencio.
Hay pocas cosas tan ensordecedoras como el silencio — Mario Benedetti
¿Te ha gustado el post? ¡Puntúalo!
FOTO DE PORTADA: Mirador de Stegastein (Aurland, Noruega) tomada en junio de 2016 en mi inolvidable viaje al país de los fiordos
¡Compartir es mejorarnos!
Miguel, cómo estás?
Me ha encantado tu post, gracias por compartir tus aprendizajes!!
En mi caso desde hace un tiempo uso la técnica pomodoro con una pequeña modificación, en vez de descansar 5 minutos, mis descansos son de 10 minutos. Pues se me hacía poco el descanso de 5 minutos.
En los cuales simplemente me preparo mi bebida favorita.
Nos leemos!!
Carlos
Hola Carlos,
Un placer leer tu comentario. Conozco la técnica pomodoro, pero al igual que comentas, 5 minutos quizás son pocos. Entre que te levantas a preparar tu bebida favorita, la preparas y te la bebes, han pasado más de 5 minutos, así que mejor un poco más que tampoco es tanto. Lo que pasa con esto es que no somos conscientes de la importancia de las pequeñas cosas, como 10 minutos de descanso. Por eso que me guste el concepto minimalista, ya que menos es normalmente más (y en este caso, poco es normalmente mucho).
Por curiosidad, ¿cada cierto tiempo haces una descanso mayor, o siempre paras 10 minutos?
Gracias por tu comentario y bienvenido a este proyecto, eterno aprendiz.
Un abrazo para Uruguay!
Que cierto es!! Me acuerdo cuando mis padres me decían este verano: «a una isla de Maldivas te vas a ir? Pero qué vas a hacer allí? Si no hay nada que hacer! Y encima 8 días!! Te vas a aburrir como una ostra…» Y yo le repondía: «Exacto, quiero no hacer nada, necesito aburrirme, escuchar el silencio… » y es que realmente necesitaba un buen descanso para desconectar un poquitín del trabajo 🙂
Hola Silvia,
estoy de acuerdo contigo, hace falta cada cierto tiempo estar en desconexión con el ajetreo diario. Esto no lo he contemplado totalmente en este artículo, pero es otra de las formas de descanso y autoconocimiento más útiles. El irte «de retiro» unos días o algún sitio tranquilo y relajante es una de las mejores maneras de contribuir a un descanso de cuerpo (pero sobre todo de mente) que marca la diferencia. Y como bien dices, es posible escuchar el silencio, aunque no todo el mundo está por la labor 🙂
Gracias por tu comentario!
Muy buen artículo, Miguel.
Este tema de descansar no haciendo nada (o específicamente meditando) es algo que empecé a practicar hace algunos meses y sí que me siento más tranquilo y con más energía luego de hacerlo, especialmente en esos momentos de ansiedad o desánimo.
¡Un saludo!
¡Hola Camilo!
Qué bien tenerte por aquí. Gracias por tu aportación. Yo soy un poco principiante aún en el amplio campo de la meditación pero no por ello he aprendido la importancia que puede tener en cada uno de nosotros. Sirve para muchas cosas, como para calmar la ansiedad como tú comentas. Más adelante explicaré otros beneficios, como el de conocerse más a uno mismo.
PD: ya te edité el comentario, gracias por decírmelo!
Un saludo Camilo!
Claro, ¡tiene muchos beneficios!
Gracias por editar mi comentario. Una cosa más, Miguel. No me llegó ningún mail notificándome que me habías respondido; volví acá por casualidad y me di cuenta. Sería pertinente que llegara un mail y así no perderse uno de las interacciones acá en los comentarios.
¡Un saludo!
Hola Camilo,
muchas gracias por tu observación. Ya he conseguido encontrar un plugin para seleccionar al gusto si deseas la notificación via email de respuestas a tus comentarios.
Ya puedes ver una casilla debajo de tus comentarios para ello.
Muchas gracias por mejorar el blog.
Un saludo!
Pensaba que solo era un tema de configuración, pero veo que era algo más complicado.
Y siendo así, ¡genial que lo hayas solucionado tan rápido!
Gracias a ti por tener en cuenta mi sugerencia.
¡Un saludo!