¿Te ves diariamente abrumad@ por la cantidad de cosas que “tienes que” hacer? Trabajo, proyecto, amigos, familia, compromisos, eventos, compras…
¿Sientes que no puedes seguir así y los fines de semana y días festivos te sirven para proponerte una vez más cambiar algo en tu vida?
Te voy a decir algo que ya sabes. Pero saberlo no es suficiente. Ahí va:
la clave se basa en establecer prioridades
Lo obvio obviado.
Pero no te engañes: este post no es el típico con 5 claves para priorizar en base a objetivos, orden de prioridades, ley de Pareto y demás.
Hoy te traigo una forma sencilla por la que empezar a aprender cómo establecer prioridades en la vida y, de paso, darte una vueltecita por cómo va tu vida hasta el momento.
¡Vamos a por ello!
Vivimos como si el dinero fuera limitado. Vivimos como si el tiempo fuera ilimitado
En la famosa película In Time se nos muestra un mundo en el que el tiempo es lo más importante.
A las personas se las paga con tiempo (en vez de con dinero), se realizan las transacciones con tiempo y, cuando te quedas sin tiempo (el cual puedes chequear en todo momento en tu antebrazo izquierdo) sencillamente mueres.
Como escuché una vez a Dimitri Uralov, vivimos como si el dinero fuera limitado y como si el tiempo fuera ilimitado. 100% de acuerdo.
Este no es un proyecto para solventar lo primero, pero sí para tener una concepción diferente de lo segundo.
Comencemos, si te parece, por un paseo por la ciudad de Kamir:
Todos sabemos, de manera intuitiva, que el único y verdadero tiempo vivido es aquel en el que se disfruta intensamente de algo.
Sin embargo, nuestro día a día dista bastante de ello.
Seguramente te cueste encontrar momentos para disfrutar de algo o de alguien y, cuando los encuentras, por lo general estamos tan sedados por la rutina que somos incapaces de estar plenamente presentes en ese goce.
Parafraseando a Bucay, ¿por qué no empezar a hacer caso a esas sensaciones que vienen de un lugar desconocido de ti mism@?
Tus mínimos vitales
Te lanzo 3 preguntas:
1) ¿A quiénes querrías tener cerca en tu día a día (pasar tu valioso tiempo con ellos)?
2) ¿Qué es para ti importante en tu vida?
O dicho de otro modo…
¿Cuáles son tus mínimos vitales?
Te propongo hoy lo siguiente:
♥ Conecta el buscador que habita en ti y lista 5 personas (como máximo) que te llevarían a tomar tu libreta del cuento y anotar experiencias disfrutonas con ellas.
♥ Ahora lista 5 actividades como máximo (hobbies, tareas, proyectos, deportes, etc) que realmente dirías que son importantes en tu vida y que te conectan con momentos que sin duda anotarías en esa valiosa libreta.
Y ahora, la tercera pregunta:
¿qué te impide en la actualidad dedicarle, cada semana (no digo cada día, sino cada semana), parte de tu tiempo a esas personas y a esas actividades?
Cómo Establecer Prioridades en la Vida: vamos a hacerlo sencillo
A la hora de establecer prioridades en nuestras vidas normalmente planificamos en base a unos objetivos previamente definidos (anuales, trimestrales y mensuales).
Pero lo que aquí te propongo es empezar por algo mucho más simple: planificar tu próxima semana, del lunes 1 al domingo 7 de mayo (o la que toque cuando estés leyendo este post).
La vida se ha encargado incluso de ponértelo aún más sencillo, ya que el lunes 1 de mayo es Fiesta Nacional en España, el martes 2 en Madrid y el domingo 7 es el Día de la Madre en España.
No hay excusas para no comenzar con esto.
Si además tienes un proyecto emprendedor entre manos que lo compaginas con un trabajo por cuenta ajena, aprender cómo establecer prioridades es una habilidad esencial, tanto para tu trabajo, como para tu proyecto, como para tu vida.
Bien, pues una vez reducida la abrumadora primera sensación de priorizar a simplemente planificar tu próxima semana, vamos a ver cómo se hace esto de la forma más efectiva posible 😉
Cómo Establecer Prioridades en la Vida en el MEDIO PLAZO: la semana
Ya me habrás oído decir muchas veces que la unidad de planificación más efectiva es la semana, ya que otorga un tiempo justo para no suponer y adivinar muchas cosas (en un futuro lejano) y a la vez da una perspectiva idónea para no dejarnos llevar por la vorágine diaria.
Coincidirás conmigo en que vivimos obcecados en el día a día, totalmente hipnotizados por la rutina que sigilosamente se cuela en nuestras vidas y que sólo nos da permiso para salir de sus garras en el momento de acostarnos (que es cuando ya por fin aceptamos que no vamos a “HACER” nada más por hoy).
Pues bien, el plan semanal nos permite salir de esa rutina por un instante a la semana y tomar perspectiva, de tal forma que nos permite pasar de “trabajar en el trabajo” (como autómatas), a “trabajar sobre el trabajo” (como personas que usan su intelecto).
¿Cuál es la diferencia?
¿Trabajas en el trabajo o sobre el trabajo?
Cuando “trabajas en el trabajo” te pones a ello desde el inicio del día y terminas cuando terminas, sin un orden, sin un objetivo, sin unas prioridades.
Incluso te puedes permitir ”perder el tiempo” con tareas innecesarias, ver videos que no te llevan a nada o hacer cosas sin ton ni son, dejándote llevar por la poca energía del final del día.
Y ahí normalmente no queda tiempo para nada relacionado con tus mínimos vitales (personas y actividades vitales para ti). Vas por la vida como los caballos con anteojeras, sin ver más allá que la zanahoria que tienes delante.
Sin embargo, cuando “trabajas sobre el trabajo” tú tomas las riendas de ese caballo, eres capaz de quitarle las anteojeras y de comerte la zanahoria.
Dotas la semana de sentido, por mínimo que sea (aunque ahora creas que poco se puede sacar de ahí).
Planificas que x día vas a llamar a una de esas 5 personas especiales para ti, que el sábado por la tarde vas a hacer esa actividad que tanto te gusta y que el domingo por la mañana vas a dedicarte tiempo a ti mism@, porque, en efecto, una de esas 5 personas más importantes de tu vida has de ser tú (mi experiencia de vida me ha hecho ver que he de ser la primera en la lista).
Corre y cambia la lista si no te pusiste en ella, anda…
Así, lo que te propongo es que en la próxima semana te reserves tiempo para llamar o estar con varias de las personas de tu lista de mínimos vitales, y también para realizar algunas de las actividades más importantes para ti.
Nada más. Fácil de momento ¿verdad?
Vamos ahora un paso más allá.
Cómo Establecer Prioridades en la Vida en el CORTO PLAZO: el día
Todos tenemos cada día varias tareas que queremos hacer (y en el trabajo, que “debemos hacer” para no tener un problema).
Y a esas hay que añadirles algunas que suelen aparecer como imprevistos. Menos mal que para esto último tienes aquí la solución.
Como un barco sin rumbo
Para conocer cómo priorizar con efectividad te diré primero qué ocurre cuando no priorizas o cuando dejas para el final tus prioridades.
En pocas palabras, te sientes como una mierda. ¿A que sí? Te vuelves poca cosa, sin recursos, porque sientes que vas a contrarreloj, que no te alcanza el tiempo, como el conejo de Alicia en el País de las Maravillas.
¿Qué hora es? ¿Qué hora es? ¡¡¡Ya son más de las 3!!! ¡Me voy, me voy, me voy me voy me voy!
Esto se debe a que estás pensando, inconscientemente, en todo lo que te queda por hacer, y se convierte en una “carga mental” que no te quitas ni en el momento de comer ni cuando vas al servicio.
Y como la mente y el cuerpo están íntimamente conectados, ésta produce estrés a nivel físico, y comienzas a respirar alteradamente, a sentir sequedad de boca, a estar más irascible, a tener tensa la mandíbula, la espalda, los hombros, etc.
El tener varias cosas en la cabeza, sin un orden y no saber gestionar ese “aún me queda mucho por hacer” es una de las peores sensaciones que puedes sentir en tu vida, porque te preocupas por algo de lo que no te puedes ocupar EN ESE MOMENTO.
No te apures, lo hacemos todos, pero lo que te propongo a partir de hoy es que seas consciente de ello, y que pases a centrarte únicamente en lo que ahora mismo tienes entre manos.
Sólo hacer esto te libera de gran parte de ese estrés, ya que si estás en el ahora no estás en «lo que queda».
Sólo puedes físicamente hacer una cosa a cada momento. Acéptalo y recuérdaselo a tu mente a diario. De nuevo, lo obvio obviado.
Pasando de tener reloj a tener tiempo
Sencillamente lo que te propongo es lo siguiente: antes de comenzar tu día ¡¡planifícalo!!!
Sí, ya sé que no se puede adivinar el futuro, pero el tener una buena idea de a qué quieres dedicar el día de hoy, de qué te entra y qué no, y de qué es prioritario va a hacer que tengas la sensación de que tú controlas tu tiempo.
Son 5 min, de verdad.
Y cuando lo haces varios días seguidos, esa sensación se convierte en hábito, y ya pasa a la mente como algo habitual en ti: tú controlas tu tiempo.
Igualmente, te propongo que cuando algo nuevo surja a lo largo del día, pares 30 segundos y valores qué prioridad tiene.
Si se puede dejar para otro día, agéndalo y listo, y si tiene prioridad alta y has de hacerlo hoy, decide qué tarea quitas de las que planificaste para hoy y asígnale un lugar en tu cola de trabajo.
Planifica teniéndote en cuenta también a ti (y no sólo a los demás)
¡Planifica tu día teniéndote en cuenta también a ti, por Dios!
Tus horas de comida, tus momentos en los que más energía tienes, en los que menos, tus mini descansos para coger energía… Aquí puedes encontrar inspiración sobre cómo hacer esto.
Las prioridades son claves, y si algo quiero que te lleves de este post es que antes de cualquier día de trabajo o de proyecto, incorpores el hábito de decir:
¡¡PRIORIDADES!! ¿Cómo voy a empezar sin prioridades? ¿Qué prioridades tengo para hoy?
Tareas Roca y orden de prioridades
Ya sabes que mi enfoque es que poco es mucho, que lo pequeño es lo grande.
Así que cuando establezcas prioridades en el día selecciona 1 o 2 como máximo a nivel profesional y 1 o 2 máximo a nivel personal, y ponte al inicio del día con la primera de ellas.
A estas las llamaremos Tareas Roca y son las que sí o sí han de quedar hechas antes de que termine el día.
Y al resto de tareas que te propones hacer, te invito a ponerles un numerito al lado que represente el grado de prioridad que tiene para el día de hoy (1 si es mucho, 2 si es medio y 3 si es poco).
Esto sirve para marcar un orden de prioridades sin estresarte, en pequeños bloques, es decir, sin enumerar todas en un orden fijo.
Y estas Tareas Roca del día son las que han de constituir, el día que proceda en base a tu plan semanal, tiempo para tus mínimos vitales (personas o actividades).
¿Te propusiste hoy miércoles bailar en casa? Esa es una de tus 2 Tareas Roca del día en lo personal.
¿El lunes y jueves le dedicarás 1 hora a tu proyecto antes del trabajo? Esa es una de tus 2 Tareas Roca del día en lo profesional (o personal, como lo quieras ver).
Deja de tener reloj y comienza a tener tiempo
¿Te has sentido identificad@ con nuestro buscador de Kamir?
Contéstame ahora honestamente, ¿qué te impide en la actualidad dedicarle cada semana parte de tu tiempo a esas personas y a esas actividades?
Déjame tu respuesta en los comentarios. ¡Tengo curiosidad! Te responderé por privado de forma personalizada.
Espero y deseo que este post te haya servido como reflexión acerca de en qué estás utilizando tu tiempo, y de inspiración y motivación para comenzar a cambiarlo.
Un abrazo prioritario!
Miguel Ángel
PD: Si después de leer este artículo quieres mejorar en la gestión y definición de tus prioridades, ya sea en tu trabajo o en tu vida (pero no sabes cómo empezar) tengo algo para ti.
Ofrezco una sesión de 1h para trabajar tus prioridades y verlas juntos. Apúntate aquí abajo y me pongo en contacto contigo.